Libros reales en la obra de Lovecraft.
Los libros prohibidos son un elemento esencial —y muy frecuente— en la obra de H.P. Lovecraft. En todos sus relatos se menciona la existencia de algún libro maldito. No todos ellos son apócrifos (ver: Libros apócrifos en los Mitos de Cthulhu); de hecho, la mayoría son reales.
La presencia de estos libros prohibidos en los cuentos de Lovecraft es exclusivamente funcional. Están allí para generar un efecto de verosimilitud en la historia, casi siempre, salpicada de hechos fantásticos que de otro modo no tendrían un nexo con el mundo lógico y cordial en donde se mueve la mente del protagonista.
La mayoría de los libros utilizados por Lovecraft son apócrifos. Entre ellos podemos mencionar al Necronomicón, los Manuscritos Pnakóticos, el Unaussprechlichen Kulten, Cultes des Goules, De Vermis Mysteriis, El libro de Eibon, entre muchos otros.
Mediante este esquema de libros apófricos, H.P. Lovecraft legitima el Horror Cósmico a través de citas, menciones y pasajes ocasionales (ver: Libros en los Mitos de Cthulhu). Pero la biblioteca siniestra del maestro de Providence no sólo está compuesta por obras apócrifas, sino por libros reales, tan concretos como los horrores que intentaba evocar a través de ellos.
Algunos de los libros reales en la obra de H.P. Lovecraft fueron seleccionados por él mismo a causa de una afinidad auditiva, pero que pocas veces poseían concordancia entre su contenido y los demoníacos conocimientos que se atribuyen dentro de la narrativa.
Sin más demora repasemos algunos de estos libros reales. Varios de ellos hacen referencia a la criptografía por el simple hecho de que Lovecraft poseía un solo volúmen de la Enciclopedia Británica, que incluía justamente la letra C; de donde rapiñaba títulos extraños y sugerentes para convertirlos en verdaderos manifiestos de lo desconocido.
- Ars Magna et Ultima, 1517, Raimundo Lull.
- Atlántida y la perdida Lemuria (Atlantis and the Lost Lemuria), W. Scott-Elliot.
- Clavis Alchimiae, Robert Fludd (1574–1637)
- Cryptomenysis Patefacta, John Falconer, 1685. Citado en El horror de Dunwich (The Dunwich Horror). Su título significa «el arte de encriptar información».
- Daemonolatreia, Nicolás Remy (1530–1612). Compendio sobre brujería.
- De Furtivis Literarum Notis, Giovanni Battista della Porta (1535–1615). Su título significa «sobre los símbolos secretos en cartas».
- De Lapide Philosophico, Tritemius (1462–1516). Literalmente significa «sobre la piedra filosofal».
- El culto de las brujas en Europa Occidental (The Witch-Cult in Western Europe). Margaret Murray.
- El libro de Dzyan. Texto tibetano descubierto a finales del siglo XIX.
- Image du Monde, Gauthier de Metz.
- Kryptographik, J.H. Klüber. Obra sobre criptografía editada en 1808.
- La llave de la sabiduría Arthepius.
- Liber Investigationis, Geber. Obra que data del siglo VI.
- Polygraphia, Tritemius. Obra que también estudia la criptografía.
- Reino de Congo (Regnum Congo), Filippo Pigafetta. Libro que analiza la botánica del Congo.
- Saducismus Triumphatus, Joseph Glanvil. Publicado en 1681.
H.P. Lovecraft. I Libros prohibidos.
Más literatura gótica:
- Borges y la misteriosa copia del «Necronomicón» en la Biblioteca Nacional de Buenos Aires.
- «Cánticos de Dhole»: Lovecraft, Tolkien, y una fuente común en Arthur Machen.
- «Cultus Maleficarum»: el libro más extraño de los Mitos de Cthulhu.
- Richard S. Shaver y el mapa oculto en un cuento de Lovecraft.
1 comentarios:
Buenísimo estudio sobre su inspiración en libros... Algunos los conocía, pero otros... Me han encantado!!
Un saludo y muy buen trabajo!
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