Pesadillas dentro de otras pesadillas


Pesadillas dentro de otras pesadillas.




Aquel marco poético diseñado por Edgar Allan Poe en Un sueño dentro de un sueño (A Dream Within a Dream), donde el acto de soñar produce distintos sustratos o planos de percepción donde es posible habitar, e incluso extraviarse eternamente, también tiene su aplicación dentro de las pesadillas.

Para desarrollar el concepto de pesadillas dentro de otras pesadillas recurriremos a la más oscura, macabra, obscena y fascinante novela que se haya escrito sobre el tema: La pesadilla árabe (The Arabian Nightmare), de Robert Irwin.

La novela relata la historia de un hombre llamado Balian, que en el siglo XIV viaja a la ciudad de El Cairo. Agotado por la travesía, se duerme y tiene un inquietante sueño, en cuyo sustrato o plano de consciencia vuelve a dormirse, y a soñar, incesantemente.

Esta dinámica conduce a una especie de espiral descendente hacia las regiones más insondables del inconsciente. En la novela, Balian sueña que despierta, pero ese despertar es apenas la entrada a un nivel más profundo del sueño inicial.

Algunos seguramente recordarán la película de Christopher Nolan, Inception, donde es posible hundirse cada vez más en las regiones oníricas, es decir, construir sueños dentro de otros sueños; pero allí la dinámica es artificial, inducida. Sin embargo, esta estructura narrativa existe desde que la fantasía fue forjada.

En cierta forma, todas las historias en donde alguien despierta y entiende que TODO FUE UN SUEÑO, se inscriben en la estructura de las pesadillas dentro de otras pesadillas.

Si el acto de soñar existe únicamente para que el inconsciente florezca sin inhibiciones, el acto de estar despierto es el sueño del inconsciente, es decir, un espacio para que la consciencia desarrolle sus inhibiciones.

En otras palabras: cuando nuestra consciencia duerme entramos en el reino del sueño; y cuando el inconsciente sueña se produce el despertar. En este sentido, despertarse cada día es entrar a un nivel distinto de un único sueño.

Conceptos como realidad son exiguos para describir cualquiera de estos estados.

Si lo real se define en términos sensoriales, cualquiera que recuerde sus sueños podrá dar cuenta de que las emociones que allí aparecen pueden ser mucho más intensas que las de la realidad.

De hecho, la imposibilidad para determinar qué es real entre el sueño y la vigilia puede explicarse apelando a una de las reglas del propio sueño.

Nada de lo que ocurre en los sueños nos parece inusual: desde volar a encontrarse con una persona muerta. Sólo cuando despertamos nos damos cuenta de que algo extraño ocurría.

¿Pero qué sucedería si la misma mecánica se produce en la vigilia?

Es decir, que constantemente atravesamos sucesos extraños en la supuesta realidad pero que no adquieren el carácter de inusual hasta que estamos soñando.

Todos, en definitiva, somos habitantes del SUEÑO, y la única forma de despertar es seguir soñando más y más profundamente.

El concepto de pesadilla dentro de otra pesadilla propone que todos los sujetos somos parte del mismo ciclo. Citando nuevamente a Inception, en la película se aclara que es imposible recordar los instantes previos al comienzo del sueño. Uno sencillamente aparece en un lugar sin saber cómo se llegó hasta ahí. ¿No podríamos decir lo mismo del acto de despertar?

Los sueños comienzan en algún sitio, pero no tienen pasado inmediato. El despertar, por su parte, tampoco.

Uno despierta en la cama, si tiene suerte, pero nadie puede recordar cuál fue el último lugar en el que estuvo dentro sus sueños; salvo que el despertar se produzca de forma abrupta, justo en medio de un sueño.

Según la propuesta de Irving, esto prueba que despertarse de una pesadilla es un signo de que hemos descendido un escalón en los niveles del sueño; es decir, que despertarse a la vida real es una formalidad, una ilusión, que disimula ese descenso a sustratos más profundos.

Ahora bien, si nadie puede recordar cómo termina exactamente un sueño, tampoco es posible recordar cómo nos metimos en él.

Del mismo modo, tampoco podemos recordar el instante preciso en el que nos dormirnos; a lo sumo, cuando alguien nos perturba en ese momento, podemos sentir que estábamos a punto de quedarnos dormidos, pero no mucho más.

Recordemos que, justo antes de quedarnos dormidos, el cerebro atraviesa una serie de procesos que rara vez quedan impregnados en la memoria consciente.

En la novela de Irwin, cuyo nombre, The Arabian Nightmare, hace referencia a The Arabian Nights, más conocida como Las mil y una noches, el ciclo del sueño nunca termina, precisamente porque nadie puede recordar qué ocurrió antes de estar despierto; es decir, no hay eslabones en la cadena de consciencia, sino más bien transiciones imperceptibles que hacen de los dos estados, sueño y vigilia, una misma cosa.

El pobre Balian atraviesa un sinnúmero de historias que no tienen principio ni fin. Cada una es apenas un capítulo, un segmento, un algo incompleto que se deshace y rehace en otros episodios igualmente inciertos.

Cualquier similitud con la vida real es puramente intencional.

Nos gusta creer que la vida es una historia, un hilo narrativo que atravesamos de manera lineal; sin embargo, la mayoría del tiempo sostenemos un argumento plagado de instantes superfluos, de baches, de rupturas. Lo peor de todo es que, al despertar, nos disponemos conscientemente a continuar el mismo sueño, la misma pesadilla, que hemos dejado en suspenso al dormir.




Diccionario de sueños. I El lado oscuro de la psicología.


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9 comentarios:

Luciano dijo...

"Si el acto de soñar existe únicamente para que el inconsciente florezca sin inhibiciones, el acto de estar despierto es el sueño del inconsciente, es decir, un espacio para que la consciencia desarrolle sus inhibiciones". Excelente reflexión y muy útil para comprender la psicología humana. Muchas gracias por compartirla con la comunidad.

Sebastian Beringheli dijo...

Gracias por el apoyo, Luciano.

Daniel dijo...

No se quien vaya a leer esto y siendo realmente franco no me importa, acabo de vivir la peor experiencia de mi VIDA, estoy nervioso, estoy muy muy asustado y no tengo ninguna vergüenza de decirlo, me cuesta escribir. Tuve pesadillas que no puedo explicar pero muy escalofriantes si es bueno decirlo de esa manera y despertaba dentro de más pesadillas en la tercera ya estaba un poco consiente de que algo andaba mal. Cada vez que despertaba tenía una sensación extrema de mareo estaba como "drogado" y despertaba siempre arrancando desde mi cama con esa sensación,recuerdo perfectamente cuandl terminó el ciclo de pesadillas, no sé exactamente cuantas fueron y no recuerdo si en todas moría, pero sin duda no se lo deseo a nadie. No espero respuesta de nadie tampoco, solo quería dejarlo escrito en algún lado porque como es normal, necesitaba explicaciones y a esto no le encuentro respuesta en ningún lado. No voy a leer ni corregir nada de lo que escribí estoy escribiendo lo que se me viene a la cabeza. Todo esto ocurrió aproximadamente (creo) entre las 3 am y finalizó a las 3:58. Quisiera explicar mas pero no puedo, estoy mal, necesito reflexionar.

Coke2206 dijo...

intenta meditar, te dara respuestas

Unknown dijo...

Hoy yo tuve esa experiencia..

Unknown dijo...

Tuve una pesadilla donde despertaba y volvia a suceder lo de la primera pesadilla, lllegaba al punto en que volvia a despertar y comenzaba todo nurva mente. Ya no recuerdo si fueron 3 o cuatro veces una y otra ves. Lo que es realmente relevante es que una vez que logre despertar de esa cadena fe pesadillas, sucedió cada episodio de mis pesadilla en la vida real. Nunca mas me volvió a suceder pero fue en ese instante en que comenzó en mi vida una pesadilla que me ha dejado marcada de por vida.

Unknown dijo...

Hola daniel, nose si vayas a contestarme pero anoche he vivido una experiencia horrible y es muy parecido a lo que te paso a ti, era como si tuviera una pesadilla y luego despertaba para darme cuenta de estaba en otra pesadilla, asi ocurrio unas 3 veces y recuerdo haberme sentido como drogada o alcoholizada pero de una manera inexplicable, finalmente en mi 3era pesadilla cuando pense que finalmente habia despertado me dirigia al dormitorio de mis padres y me empieza a dar una parálisis mientras me dirijo alla, la voz no me salia era horrible

PABLO dijo...

Muy fuerte, espero que nunca más les vuelva a ocurrir , hay muchas cosas extrañas que he visto desde hace mucho tiempo, y luego las he leído inclusive ese era uno de mis temores de niño , menos mal nunca me paso o no lo recuerdo, o me está pasando sin embargo veo que todo a mi alrededor en cuanto al mundo material aparenta ser real , y aunque no lo sea lo viviré, ojala nunca me ocurra.

superKT dijo...

Justo me pasó anoche h quedé con mal cuerpo y problemas estomacales. Sentía literal el cuerpo como peso muerto, adormecido. Fue horrible.



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