«El gusano vencedor»: Edgar Allan Poe; poema y análisis


«El gusano vencedor»: Edgar Allan Poe; poema y análisis.




El gusano vencedor (The Conqueror Worm) es un poema maldito del escritor norteamericano Edgar Allan Poe (1809-1849), publicado originalmente en la revista Graham's Magazine en 1843, y luego añadido en la versión corregida del relato de terror de 1845: Ligeia (Ligeia). [ver: Los Misterios del Gusano: análisis de «El Gusano Vencedor»]

En esta segunda versión se nos aclara que El gusano vencedor fue compuesto por Ligeia durante su agonía. Entre ambos, poema y personaje, se resumen las ideas de Edgar Allan Poe acerca de la mortalidad.

El gusano vencedor es uno de los mejores poemas de Edgar Allan Poe acerca de la muerte. El autor emplea el teatro como escenario del drama, donde una serie de mimos grotescos ejecutan sus movimientos sin saber que participan de la obra. De más está decir que se trata de una metáfora sobre la humanidad.

Edgar Allan Poe sitúa a los ángeles como testigos de esta tragedia cotidiana, quienes discuten entre sí, oscilando entre la piedad y una morbosa curiosidad. Ya al final de El gusano vencedor se anuncia la entrada de una forma imposible, demasiado horrible para describirla. Es entonces cuando los ángeles observan cómo los mimos caen uno tras otro en la voracidad del gusano.

El gusano de este notable poema de Edgar Allan Poe es claramente una metáfora sobre la muerte pero también algo más: una visión de las oscuras formas que reptan detrás de la razón.

El gusano vencedor no sólo nos recuerda que el destino de todos nosotros es la muerte sino que el universo quizás es controlado por fuerzas sombrías que no logramos comprender; y lo que es todavía peor, que las huestes de la luz tal vez sean únicamente espectadores cuya mirada distante solo sirve para justificar o legitimar ese destino.



El gusano vencedor.
The Conqueror Worm, Edgar Allan Poe (1809-1849)

Ved! En una noche de gala,
En los tardíos años desolados.
Una hueste de ángeles alados,
Envueltos en velos y ahogados en lágrimas,
Sentados en el teatro, para ver
Un drama de temores y esperanzas,
Mientras la orquesta balbucea
La música de las esferas.

Unos mimos, hechos a imagen del Dios Alto,
Murmuran y susurran en voz baja,
Revoloteando de un lado a otro:
Simples títeres que vienen y van
Al capricho de unas vastas masas informes
Que recorren el escenario proyectando
Con sus alas de cóndor el invisible Dolor.

El drama apretado (que no caerá
En el olvido, estad seguros)
Con su fantasma perseguido sin cesar
Por una turba que no lo puede apresar,
A través de un círculo que siempre gira
Sobre el mismo espacio,
Y tanta locura, y aun más Pecado
Y el Horror como alma de la intriga.

Pero, ved! en medio del gesticulante tumulto,
Una forma reptante se introduce:
Una cosa sanguinolenta que se debate
En la soledad del escenario.
¡Se retuerce! ¡Se retuerce! Con mortal angustia
Los mimos se convierten en su cena,
Y los serafines lloran al ver los colmillos
Embebidos en sangre humana.

¡Afuera, afuera las luces, afuera todo!
Y sobre cada sombra palpitante
Cae el telón, como una mortaja fúnebre,
Con el rugido de la tormenta,
Mientras los ángeles, pálidos y excitados,
Se ponen de pie y quitando sus velos declaran
Que la obra es la tragedia del Hombre
Y su héroe el Gusano Vencedor.


Lo! 'tis a gala night
Within the lonesome latter years!
An angel throng, bewinged, bedight
In veils, and drowned in tears,
Sit in a theatre, to see
A play of hopes and fears,
While the orchestra breathes fitfully
The music of the spheres.

Mimes, in the form of God on high,
Mutter and mumble low,
And hither and thither fly—
Mere puppets they, who come and go
At bidding of vast formless things
That shift the scenery to and fro,
Flapping from out their Condor wings
Invisible Wo!

That motley drama—oh, be sure
It shall not be forgot!
With its Phantom chased for evermore,
By a crowd that seize it not,
Through a circle that ever returneth in
To the self-same spot,
And much of Madness, and more of Sin,
And Horror the soul of the plot.

But see, amid the mimic rout
A crawling shape intrude!
A blood-red thing that writhes from out
The scenic solitude!
It writhes!—it writhes!—with mortal pangs
The mimes become its food,
And the angels sob at vermin fangs
In human gore imbued.

Out—out are the lights—out all!
And, over each quivering form,
The curtain, a funeral pall,
Comes down with the rush of a storm,
And the angels, all pallid, and wan,
Uprising, unveiling, affirm
That the play is the tragedy, "Man,"
And its hero the Conqueror Worm.


Edgar Allan Poe (1809-1849)




Más poemas góticos. I Poemas de Edgar Allan Poe.


Más literatura gótica:
El análisis, resumen y traducción al espalol del poema de Edgar Allan Poe: El gusano vencedor (The Conqueror Worm), fueron realizados por El Espejo Gótico. Para su reproducción escríbenos a elespejogotico@gmail.com

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Simplemente tremendo. Siempre he amado esa oscuridad desenfada de Allan Poe.

Emy dijo...

Muy bueno tenebroso y encantador

Emy dijo...

MARAVILLOSO



Lo más visto esta semana en El Espejo Gótico:

Sobre ruidos paranormales intensos.
Relato de Shirley Jackson.
Mitos de Cthulhu.

Taller gótico.
Poema de Hannah Cowley.
Relato de Thomas Mann.