«El hombre y la mujer»: Víctor Hugo; poema y análisis


«El hombre y la mujer»: Víctor Hugo; poema y análisis.




El hombre y la mujer (L'homme et la femme) es un poema de amor del escritor francés Víctor Hugo (1802-1885), escrito en 1875.

El hombre y la mujer, uno de los grandes poemas de Víctor Hugo, ensaya una descripción de las diferencias entre el hombre y la mujer, tratando de explicar sus características.

Para Victor Hugo, la mujer es una criatura soñadora, de cualidades más bien etéreas, como un ángel. Por otro lado, el hombre es visto como alguien gobernado por el cerebro, alguien racional. En este sentido, El hombre y la mujer nos invita a examinar esas cualidades opuestas, y nos anima a profundizar en la dirección de estas diversidades para comprendernos mejor a nosotros mismos y a quienes nos rodean.

De más está decir que El hombre y la mujer de Víctor Hugo parte de una premisa fundamentalmente equivocada, pero que al mismo tiempo formaba parte de los ideales del romanticismo: el hombre como entidad individual, ligada a la tierra, y la mujer como un cristal, un tamiz donde se trasluce la eternidad.




El hombre y la mujer.
L'homme et la femme, Victor Hugo (1802-1885)

El hombre es la criatura más elevada,
la mujer es el más sublime de los ideales.

Dios hizo para el hombre un trono:
para la mujer un altar.
El trono exalta;
el altar santifica.

El hombre es cerebro,
la mujer corazón..
el cerebro hace la luz, el corazón el amor;
la luz nutre, el amor resucita.

El hombre es fuerte por la razón
la mujer es fuerte por la emoción,
la razón argumenta
las emoción conmueve.

El hombre es capaz de todos los heroísmos,
la mujer de todos los martirios.
El heroísmo ennoblece,
el martirio sublima.

El hombre tiene la supremacía;
la mujer la preferencia
la supremacía significa fuerza;
la preferencia respresenta el derecho.

El hombre es un genio,
la mujer un ángel.
El genio es inconmensurable;
El ángel indefinible.

La aspiración del hombre es la suprema gloria;
la aspiración de la mujer es la extrema virtud.
La gloria hace todo lo que es grande;
La virtud hace todo lo que es divino.

El hombre es código,
la mujer es evangelio
el código corrige
el evangelio perfecciona.

El hombre piensa,
la mujer sueña,
pensar es tener una larva en el cráneo,
soñar es tener una luz en la frente.

El hombre es un océano;
la mujer un lago.
El océano tiene la perla que adorna;
El lago, la poesía que enciende.

El hombre es el águila que vuela,
la mujer es el ruiseñor que canta.
Volar es subyugar el espacio
cantar el conquistar el alma.

El hombre es un Templo;
la mujer es el Santuario.
Delante del Templo nos descubrimos
Delante del Santuario nos arrodillamos.

El hombre se ubica donde termina la tierra,
la mujer, donde comienza el cielo.


L'homme est la plus élevée des créatures;
la femme est le plus sublime des idéaux.
Dieu a fait pour l'homme un trône;
Pour la femme un autel.
Le trône exalte;
L'autel sanctifie.
L'homme est le cerveau,
La femme le coeur.
Le cerveau fabrique la lumière;
Le coeur produit l'Amour.
La lumière féconde;
L'Amour ressuscite.
L'homme est fort par la raison;
La femme est invincible par les larmes.
La raison convainc;
Les larmes émeuvent.
L'homme est capable de tous les héroïsmes;
La femme de tous les martyres.
L'héroïsme ennoblit;
Le martyre sublime.
L'homme a la suprématie;
La femme la préférence.
La suprématie signifie la force;
La préférence représente le droit.
L'homme est un génie,
la femme un ange.
Le génie est incommensurable;
L'ange indéfinissable.
L'aspiration de l'homme, c'est la suprême gloire;
L'aspiration de la femme, c'est l'extrême vertu.
La gloire fait tout ce qui est grand;
La vertu fait tout ce qui est divin.
L'homme est un Code;
La femme un Evangile.
Le Code corrige;
L'Evangile parfait
L'homme pense;
La femme songe.
Penser, c'est avoir dans le crâne une larve;
Songer, c'est avoir sur le front une auréole.
L'homme est un océan;
La femme est un lac.
L'Océan a la perle qui orne;
Le lac, la poésie qui éclaire.
L'homme est un aigle qui vole;
La femme est le rossignol qui chante.
Voler, c'est dominer l'espace;
Chanter, c'est conquérir l'Ame.
L'homme est un Temple;
La femme est le Sanctuaire.
Devant le Temple nous nous découvrons;
Devant le Sanctuaire nous nous agenouillons.
Enfin:
L'homme est placé où finit la terre;
La femme où commence le ciel.


Victor Hugo
(1802-1885)




Poemas góticos. I Poemas de Víctor Hugo.


Más literatura gótica:
El anáisis, resumen y traducción del poema de Victor Hugo: El hombre y la mujer (L'homme et la femme), fueron realizados por El Espejo Gótico. Para su utilización escríbenos a elespejogotico@gmail.com

7 comentarios:

Unknown dijo...

Me encanto esta nunca habia leido un poema de este escritor, me encanta que no deja a ninguno de los seres de mas o de menos, sino que hace que ambos juntos lleguen a complementarse.

Anónimo dijo...

No lo conocía, y es el mejor poema que he leído hasta el momento. Soy hombre, y es sublime cómo complementa al hombre (que siendo tan primitivo, es capaz de entregarse totalmente al ser querido), y a la mujer (que siendo "débil/frágil", es la más fuerte, máximo exponente de la extrema virtud, como diría nuestro amigo...)

Unknown dijo...

Una belleza este poema.
Me encantó.

Natuki dijo...

Me parece hermoso que enaltezca la imagen de la mujer, pero el mismo motivo me enoja.
Sí, ¿Víctor Hugo no menciona que las mujeres le buscamos la quinta pata al gato y que... muchas veces se la encontramos?

WARDA dijo...

cuanta sabiduría en sus palabras. poema lirico, escrito en 1875. no creo que en esa época se hablara de machismo, ni feminismo. una belleza la construcción de las metáforas para idealizar a la mujer y complementarla con el virtuoso terrenal hombre. Habla del genero femenino y masculino. no del sexo femenino y masculino. hay una gran diferencia. Admiración por su obra. no se debe sacar de contexto las obras de arte, menos si son del s xix. de 1875 a 2020 hay un largo camino.

Anónimo dijo...

Hay que ser muy especial
Para escribir ,sobre el hombre y la mujer ,resaltando lo más destacado de cada uno ,creo que ex un perfecto análisis

Anónimo dijo...

El poema es hermosísimo y como soy una firme defensora de la igualdad de género, aquellos atributos que el autor da al hombre, me los endilgo, pues son bellamente valiosos sin importar quien los lleve. Abrazos a todos



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