«50 sombras de estúpido»: el secreto de «50 sombras de Grey».
La única razón por la cual 50 sombras de Grey es una historia romántica, o de amor, según sus fanáticas, se sostiene en el dinero y el poder del hombre. Si Grey fuese un desocupado o (¡Dios no lo permita!) un hombre de color del Bronx, estaríamos frente a un episodio más de Criminal Minds o La ley y el orden.
De esto se trata 50 sombras de estúpido.
50 sombras de estúpido (Fifty Shades of Stupid), del autor Warren Murphy —bajo el seudónimo de Poupón Grey— es una feroz crítica a la novela de E.L. James: 50 sombras de Grey (Fifty Shades of Grey).
Si bien la enorme popularidad de 50 sombras de Grey, sumada al éxito comercial de la película, han despertado muchas críticas, algunas decididamente maliciosas, éste no es el caso.
50 sombras de estúpido se propone analizar el fenómeno de 50 sombras de Grey desde una óptica crítica, es cierto, pero notablemente perspicaz.
50 sombras de estúpido empieza desmenuzando las feroces críticas que cayeron sobre la novela de E.L. James; llegando a la conclusión de que éstas son producto del desagrado de ciertos grupos de feministas, disgustadas por la laxa paradoja de una historia acerca de un hombre poderoso, apuesto, que tortura y somete a una especie de ingenua estudiante, vulnerable, virginal, y quizás emocionalmente inestable, convertida en un éxito justamente entre las mujeres.
Millones de lectoras (y por qué no, lectores) han caído bajo la fuerza de atracción de 50 sombras de Grey. ¿Por qué?
Quizás porque evalúa una paradigmática fantasía femenina pero también uno de sus miedos primordiales.
El éxito de 50 sombras de Grey se construye sobre esta múltiple combinación de factores entre la fantasía y el miedo.
Probablemente las lectoras de la novela de E.L. James aprueben sus apasionadas escenas, justamente porque el contexto las sostiene dentro de los parámetros de la fantasía, es decir, de una excepción.
Por otra parte, resulta indudable que la mayoría de las mujeres que sufren estos asaltos quedan sin aliento por otras razones, en general, por quedar inconscientes.
Desde luego, el estilo de vida que propone 50 sombras de Grey es admisible, siempre que exista consenso, pero éste solo puede darse en una situación de igualdad entre dos personas, tanto de poder como de elección.
Más allá de estas oportunas críticas, lo cierto es que 50 sombras de estúpido examina con escaso éxito el fenómeno cultural de 50 sombras de Grey, aunque con mejor puntería sus aspectos psicológicos.
En definitiva: ¿Por qué a las mujeres les gusta 50 sombras de Grey?
O, ampliando la pregunta: ¿Por qué las mujeres se sentirían atraídas por la improbable fantasía de que un hombre rico y poderoso las someta física y psicológicamente?
Imposible saberlo, así como tampoco podremos descifrar por qué muchas de ellas, idénticamente desequilibradas, se inclinan por amar incondicionalmente a sujetos con graves problemas económicos, carentes de poder y de atractivo.
Tal vez en está última pregunta se esconda el secreto del éxito de 50 sombras de Grey.
En última instancia, el fenómeno comercial de 50 sombras de Grey puede ser una novedad, no así su historia.
A las mujeres siempre les gustaron los chicos malos.
Feminología. I El lado oscuro del amor.
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6 comentarios:
Para mi desagrado leí el primer libro, más que todo por complacencia de mi pareja de aquel entonces,aunque al final la lectura se redujo a términos meramente analíticos. Constaté la vacuidad de su prosa y lo superfluo del estilo de vida que los personajes exponen,por no decir que el motor de la historia es un insulto a la comunidad BDSM.
Lamento el tiempo empleado leyendo esa mierda, al menos pude compensar el disgusto con La Histoirie d'O, de mademoiselle Pauline Réage.
El problema con 50 sombras de Grey es que necesitas leerlo sin juzgar, simplemente dejar de tratar de racionalizar todo y esperar hasta el final de la trilogía para sacar conclusiones, si no no entenderás nunca nada y le tomaras un odio sin sentido a la historia, leyendo el 1º libro no haces nada porque la historia avanza demasiado en los dos últimos libros, películas o lo que sea.
Yo casi vomite en el primer con el primer libro, pero un mes después leí el segundo y me enamore de Chistian así de fácil.
Anónimo, de todas formas así sea el 2 o el 3 libro, es una mierda que no contribuye en nada a la humanidad.
La trilogía 50 sombras de grey trastornan a las mujeres y hombres de mentes débiles. Yo lei una adaptación y me encanto hay que tener en mente que solo es una historia y que no pasa en la vida real. Cada quien elige como viver su vida y a nadie le debe de importar.
No quiero leer una trilogía para entender que el personaje tiene complejo de Humbert humbert: El hombre busca a una niña o niña-mujer, una virgen,como compañera de cama buscando reforzar su autoestima al haber tenido encuentros con mujeres de su misma edad y haber fracasado en estas relaciones.
Se supone, además, que el primer libro es el que engancha. No importa el tema que trate (El BDSM no es NADA comparado con el incesto en Flores en el ático) mientras lo represente en un escenario bien pensado.
No me lei ninguno de los 3 libros, de casualidad lei unas líneas del 1er libro y lo que me sorprendió es que haya sido un éxito. La 1ra pelicula si la vi, y la conclusion que yo hago es: Felicitaciones para Hollywood que saco lo mejor de una historia para hacer una pelicula aceptable.
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