Significado de soñar con un abandono.
Las formas del abandono son muchas, casi tantas como los anaqueles laberínticos de nuestro Diccionario de sueños.
Soñar con ser abandonado, además de cumplir la función de identificarse con el miedo a ser traicionado o abandonado, representa la necesidad de desprenderse de las sensaciones y características de una mentalidad inmadura y posesiva.
En este caso, naturalmente, hablamos de sueños de abandono que no tienen una matriz objetiva, es decir, que no proceden de un abandono real.
Los sueños de abandono son un procedimiento natural que nos «entrena» para lidiar con una hipotética situación análoga en la vida real. En los casos de personas que han sido dejadas por su pareja, los sueños de abandono pueden interpretarse como parte del proceso natural de curación del Ego.
Casi todos los sueños de abandono tienen su fuente en la infancia, época marcada por temores inconscientes a ser abandonado por los padres; uno de los miedos atávicos más poderosos del ser humano, ya que la separación de la familia es también el ingreso a todos los peligros del mundo, ya sin el tamiz de la protección parental.
Si, en cambio, soñamos que abandonamos a alguien podría tener relación con sentimientos abrumadores, con problemas y decisiones que nos sobrepasan.
Muchas personas han sido «abandonadas» momentáneamente durante la infancia, es decir, niños que se han extraviado por unos minutos, pero que han archivado la experiencia en los arcones más tenebrosos del Inconsciente. Para despejar las dudas sobre los sueños de abandono, y sobre todo para eliminar la posibilidad de que se trate de un residuo de aquella experiencia nefasta, conviene diseccionar un poco la clase de abandono que hemos soñado.
¿Quién abandona a quién en el sueño? ¿Es una o más personas las que nos han abandonado? Y, en caso contrario, ¿hemos abandonado un grupo o a un individuo?
Si en el sueño somos abandonados por una pareja, entonces hablamos de una representación clara y sin ambigüedades de nuestras propias inseguridades con respecto a esa relación.
Si somos abandonados por un grupo, por ejemplo, nos sentimos extraviados en una montaña, entonces estamos frente a una manifestación del temor atávico a ser abandonado por nuestro grupo familiar.
En general, los sueños de abandono tienen una doble faz difícil de abordar con generalidades. El acto de abandono en sí mismo no es un emergente consolidado en nuestros miedos. Es el aislamiento, el temor a estar irrevocablemente solos, lo que produce angustia.
Los sueños en los que nos abandona nuestra pareja poseen, además, un fuerte matiz culposo. Estadísticamente hablando, las personas que sueñan recurrentemente con ser abandonadas por su pareja son aquellas que han sido infieles, o que bien soportan el peso de un secreto inconfesable.
En ocasiones, sentirse abandonado en un sueño representa nuestras incapacidades para ajustarnos a la sociedad, o al menos a lo que la sociedad, representada en nuestros familiares cercanos, espera de nosotros.
Muchas veces el abandono en los sueños no es estrictamente físico, de hecho, podemos estar rodeado por nuestros seres queridos, pero sentir intensamente que nos han abandonado, que no nos escuchan, que no nos ven, como si fuésemos fantasmas incapaces de comunicarnos.
Adicionalmente, los sueños recurrentes en los que el sujeto es abandonado, casi siempre reflejan una personalidad que no logra consolidar sus afectos.
Diccionario de sueños. I El lado oscuro de la psicología.
Más literatura gótica:
- Cuando dos personas sueñan lo mismo.
- Sueños telepáticos.
- Sueños Lúcidos.
- ¿Se puede hackear los sueños?
1 comentarios:
¡Buena interpretación!
Publicar un comentario