«Lesbia Brandon»; Algernon Swinburne; novela y análisis.


«Lesbia Brandon»; Algernon Swinburne; novela y análisis.




Lesbia Brandon (Lesbia Brandon) es una novela del romanticismo del escritor inglés Algernon Charles Swinburne (1837-1909), escrita entre 1859 y 1868 y publicada póstumamente. un siglo después de su composición, a causa de su fuerte contenido filosófico.

La novela desnuda la naturaleza transicional de la obra de Algernon Swinburne. Su obra no responde a las características de los primeros románticos (John Keats, lord Byron, Samuel Coleridge, Percy Shelley) y tampoco a los esteticistas del fin de siglo (Oscar Wilde). Sin embargo esto no se corresponde con una falta de originalidad, por el contrario. Algernon Swinburne busca en Lesbia Brandon algo prácticamente impensado en su tiempo: reinstaurar en la era victoriana el gozo pagano de lo sexual.

Como es perfectamente comprensible en un hombre como Algernon Swinburne, este «despertar» hacia lo blasfemo del amor posee una fuerte carga de culpa, una culpa cristiana y rígida, que en su obra a menudo se traduce en fantasías de sadismo y flagelación.

En este sentido, la poesía de Algernon Swinburne se levanta como una torre frente a la caída del romanticismo. Admiró a Sade, a Théophile Gautier, a Baudelaire, y sobre todo el decadentismo francés, a quienes «usó» para fortalecer su posición frente a una sociedad que después del siglo XVIII había perdido todo registro de apertura sensual.

Lesbia Brandon es un llamado a la libertad erótica. Se trata de un conjunto de personajes y capítulos, no siempre articulados, agrupados en una novela que Algernon Swinburne nunca completó. Debieron pasar casi cien años desde su composición para conociera las imprentas. El encargado de «corregir» el texto (y para muchos de mutilarlo) fue el crítico Randolph Hughes.

Más allá de las acusaciones acaloradas de los seguidores de Algernon Swinburne, que denunciaron a Hughes prácticamente de un «montaje», Lesbia Brandon presenta casi todas las obsesiones de Swinburne, entre ellas: una especie de tensión sensual entre hermanos disimulada bajo la máscara del amor fraternal.

Este tópico escandaloso, que ya se insinúa en Percy Shelley, alcanza en Algernon Swinburne la cima de la decadencia. Sin embargo, no todo responde a cuestiones filosóficas, sino también sociológicas. La sociedad victoriana había levantado un muro entre hombres y mujeres, haciendo de la relación fraternal una de las pocas excepciones en la relación entre hombres y mujeres. Algernon Swinburne simplemente muestra lo que puede suceder cuando solo existe un vía de escape para una pulsión ancestral.

Lesbia Brandon expone además una mecánica compensatoria entre esas mismas pulsiones. Por ejemplo, que el ascetismo sexual del protagonista se vea compensada por la activa vida marital de su hermana. Vale aclarar que Algernon Swinburne solo coquetea con el escandalo pero nunca lo concreta realmente. La relación entre los hermanos es tensa, pero de una tensión espiritual más que sensorial. El verdadero disparador opera a través de una segunda mujer, llamada Lesbia Brandon, en realidad una muchacha joven, poetisa y pagana, que cautiva a Herbert (el protagonista), y lo lleva hacia un nuevo nivel de castidad, donde la tristeza encuentra un cauce idílico para manifestarse.

Lo interesante de Lesbia Brandon es justamente esta idea de que la castidad no prescinde del erotismo. Todo lo contrario, el ascetismo amoroso muchas veces amplifica la tensión sexual, «desviándola» de los cauces permitidos por la sociedad.

Difícilmente hallemos una versión digital de Lesbia Brandon. Para leerla no hay más que acercarse a una buena biblioteca especializada.





poemas de Algernon Swinburne. I Novelas góticas.


El análisis y resumen de la novela de Algernon Swinburne: Lesbia Brandon (Lesbia Brandon) fue realizado por El Espejo Gótico. Para su reproducción escríbenos a elespejogotico@gmail.com

0 comentarios:



Lo más visto esta semana en El Espejo Gótico:

Sobre ruidos paranormales intensos.
Relato de Shirley Jackson.
Mitos de Cthulhu.

Taller gótico.
Poema de Hannah Cowley.
Relato de Thomas Mann.