Ahamkara: la Ilusión del Yo


Ahamkara: la ilusión del Yo.




Ahamkara es una palabra, y como toda palabra ésta tiene sus alcances y sus límites; y así como el hombre a menudo confunde el alcance de su filosofía, la palabra también se extravía en su propio significado.

Si visitamos un diccionario filosófico de la India acaso descubramos que el término Ahamkara se vincula con el egoísmo; cuestión que no es completamente desacertada, aunque sí incompleta.

La palabra Ahamkara tiene al menos 3.000 años de antigüedad. Fue acuñada por la filosofía védica; y proviene de las palabras Aham, algo así como el «Yo»; y Kāra, todo aquello que ha sido creado. En palabras simples Ahamkara es el Yo, pero un Yo desarticulado, creado a medida por su usuario, una construcción ilusoria que aisla al sujeto del universo que lo rodea, haciéndole creer que tiene una entidad y una autonomía que no son reales.

Los Vedas anuncian que nuestra mente vive y reacciona envuelta en el Ahamkara; es decir, en un estado de ilusión subjetiva donde todo existe a través de la noción del Yo. En este sentido, lo real y lo irreal se deshacen y se confunden en el Ahamkara, nos vuelven poderosos o tímidos y asustadizos a medida que sus velos se vuelven más espesos. La función práctica del Ahamkara es permitirle al hombre desenvolverse en el mundo de los sentidos, aunque no sin riesgos. Si tomamos muy en serio la función del Ahamkara acaso caigamos en el error de creer que realmente existimos.

«Todo es Ilusión», denuncian los Vedas; el mundo, la naturaleza, incluso el cuerpo que vestimos con mayor o menor elegancia, son tan subjetivos como la mente que los percibe. No se trata de una Ilusión en el sentido de que estas cosas no son reales; lo son, y en muchos casos, lo son intensamente; sólo que en un plano que desvía al hombre de su jornada de autonocimiento.

La rueda del Ahamkara nos absorbe. Se vuelve densa como una nube, húmeda como un manto de niebla. Es fácil perderse en ella. ¿Cómo no perderse en los brazos de una mujer hermosa? ¿Cómo no ceder ante las delicias de la voluptuosidad, del arte, de la literatura? Si hay un infierno de goce sensorial, ése es el Ahamkara.

La verdadera confusión en torno al Ahamkara se produjo con la llegada del hinduismo y sus interpretaciones. Se pensó que el Ahamkara era una fe excesiva en el Yo, cuando en realidad es el error de creer al Yo separado del Yo Universal, es decir, de los demás. Esta trepanación conceptual anula -por ejemplo- la trascendencia a través del amor.

Los gurúes y arúspices de tripas televisivas vociferan contra el hombre que se arroja sobre el mundo, es decir, sobre el mundo en tanto experiencia sensorial. Desde aquí, propiciamos el abandono de goces extáticos e hipotéticos, y en cambio preferimos al viejo cabrón de Epicuro sobre las higiénicas elucubraciones de los Vedas. El Yo bien puede ser una Ilusión, pero también puede ser una Ilusión maravillosa, lejos del magnetismo mesmérico del consumo y la adquisición desmesurada de supuestos bienes, y más cerca del disfrute de las cosas simples [o complejas] que no requieran más que un leve desapego por los deseos impuestos por la sociedad.

El Ahamkara [vale aclararlo] continúa peligrosamente vigente. Por allí andan hombres constreñidos que se ven a sí mismos en todo lo que los rodea; indiferentes a la verdadera experiencia del Yo; cuya naturaleza necesita menos del lo que nos promete la publicidad y mucho más de lo que habitualmente le damos.




Egosofía. I Misterios.


El artículo: Ahamkara: la Ilusión del Yo fue realizado por El Espejo Gótico. Para su reproducción escríbenos a elespejogotico@gmail.com

9 comentarios:

Anónimo dijo...

Esta pagina esta muy bien para los que buscan material paranormal

arturo dijo...

Ahamkara es una palabra totalmente nueva para mi, este blog se vuelve mas y más interesante

Anónimo dijo...

El amor visto a manera personal está estrechamente vinculado al amor universal. Es la capacidad de amar la que evoca la expansión hacia lo exterior e interior. Por lo que en mi opinión si hace trascendencia. Me ha encantado leer esto. Buenísimo! Como cada letra que conforma este blog único.

Anónimo dijo...

Me encantó este artículo !!!quería pedirte permiso para compartirlo y que me digas si puedo copiar y pegar, por supuesto haciendo mencion a El espejo Gótico o si necesariamente debería pegar la dirección de la página. Muchas gracias ...desde ya !

sofia dijo...

muy bueno!muyinteresante...

Olga dijo...

Me pueden hacer el favor de ayudarme a encontrar una palabras en sanscrito o en hindu o veda que signifique: El conocimiento de si mismo el trabajo interior. Muchas gracias.

pepelasal dijo...

Ahankâra o Ahamkâra (Sánscrito).- El concepto del “Yo”, la conciencia de sí mismo o autoidentidad; el sentimiento de la propia personalidad, el “Yo”, el egotista y mâyâvico principio del hombre, debido a nuestra ignorancia, que separa nuestro “Yo” del YO ÚNICO universal. [La individualidad, personalismo, orgullo, egoísmo, egotismo, el sentimiento del yo, conciencia del yo o ser personal. Es el principio en virtud del cual adquirimos el sentimiento de la propia personalidad, la ilusoria noción de que el no-Yo (cuerpo, materia) es el Yo (Espíritu), esto es, que nosotros somos, obramos, gozamos, sufrimos, etc., refiriendo todas las acciones al Yo, que es inactivo, inmutable y mero espectador de todos los actos de la vida.]
~ Glosario Teosofico - H.P. Blavatsky

JF dijo...

Un Blog Enriquecedor. JF.

Emilio dijo...

Genial. Por favor, publique un libro con el contenido de este maravilloso sitio.



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