«Desesperación»: José de Espronceda; poema y análisis.


«Desesperación»: José de Espronceda; poema y análisis.




Desesperación (Desesperación) es un poema del romanticismo del escritor español José de Espronceda (1808-1848), publicado en la antología de 1840: Poesías (Poesías).

Desesperación, uno de los más importantes poemas de José de Espronceda, evidencia que la filosofía del romanticismo no solo esparce su creatividad sobre el amor y el deseo. De hecho, en ocasiones derrocha una mirada muy oscura sobre el ser y el universo.




La desesperación.
La desesperación, José de Espronceda (1808-1848)

Me gusta ver el cielo
con negros nubarrones
y oír los aquilones
horrísonos bramar,
me gusta ver la noche
sin luna y sin estrellas,
y sólo las centellas la tierra iluminar.

Me agrada un cementerio
de muertos bien relleno,
manando sangre y cieno
que impida el respirar,
y allí un sepulturero
de tétrica mirada
con mano despiadada
los cráneos machacar.

Me alegra ver la bomba
caer mansa del cielo,
e inmóvil en el suelo,
sin mecha al parecer,
y luego embravecida
que estalla y que se agita
y rayos mil vomita
y muertos por doquier.

Que el trueno me despierte
con su ronco estampido,
y al mundo adormecido
le haga estremecer,
que rayos cada instante
caigan sobre él sin cuento,
que se hunda el firmamento
me agrada mucho ver.

La llama de un incendio
que corra devorando
y muertos apilando
quisiera yo encender;
tostarse allí un anciano,
volverse todo tea,
y oír como chirrea
¡qué gusto!, ¡qué placer!

Me gusta una campiña
de nieve tapizada,
de flores despojada,
sin fruto, sin verdor,
ni pájaros que canten,
ni sol haya que alumbre
y sólo se vislumbre
la muerte en derredor.

Allá, en sombrío monte,
solar desmantelado,
me place en sumo grado
la luna al reflejar,
moverse las veletas
con áspero chirrido
igual al alarido
que anuncia el expirar.

Me gusta que al Averno
lleven a los mortales
y allí todos los males
les hagan padecer;
les abran las entrañas,
les rasguen los tendones,
rompan los corazones
sin de ayes caso hacer.

Insólita avenida
que inunda fértil vega,
de cumbre en cumbre llega,
y arrasa por doquier;
se lleva los ganados
y las vides sin pausa,
y estragos miles causa,
¡qué gusto!, ¡qué placer!

Las voces y las risas,
el juego, las botellas,
en torno de las bellas
alegres apurar;
y en sus lascivas bocas,
con voluptuoso halago,
un beso a cada trago
alegres estampar.

Romper después las copas,
los platos, las barajas,
y abiertas las navajas,
buscando el corazón;
oír luego los brindis
mezclados con quejidos
que lanzan los heridos
en llanto y confusión.

Me alegra oír al uno
pedir a voces vino,
mientras que su vecino
se cae en un rincón;
y que otros ya borrachos,
en trino desusado,
cantan al dios vendado
impúdica canción.

Me agradan las queridas
tendidas en los lechos,
sin chales en los pechos
y flojo el cinturón,
mostrando sus encantos,
sin orden el cabello,
al aire el muslo bello...
¡Qué gozo!, ¡qué ilusión!

José de Espronceda (1808-1848)




Poemas góticos. I Poemas de José de Espronceda.


Más literatura gótica:
El análisis y resumen del poema de José de Espronceda: La desesperación (La desesperación), fueron realizados por El Espejo Gótico. Para su reproducción escríbenos a elespejogotico@gmail.com

2 comentarios:

Viebbo dijo...

Hola. Soy un gran admirador de tu blog, y te he dejado AlgO para ti en mi humilde Blog. Te interesará.

la aguja dijo...

Saludos. Este poema de "La desesperación" estuvo atribuido durante mucho tiempo a José de Espronceda, pero según mis informaciones pertenece a Juan Rico y Amat. En la página de la Wikipedia este poeta alicantino también se hace mención a este debate.

En otro orden de cosas me gustaría saber que tienes todo este gran trabajo salvado en tu disco duro. Los (cada vez menos) amigos de Google podrían darte un disgusto según sus nuevas políticas.
Aunque sea meterme en casa ajena, quizá merezca la pena crear un website al uso para alojar toda tu biblioteca digital y mantener un blog como complemento al site.

Muy buen trabajo el que estás realizando. Ánimo.



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