«Los Protocolos de Sión»; libro y análisis


«Los Protocolos de Sión»; libro y análisis.




Los Protocolos de Sión —en realidad: Los Protocolos de los Sabios de Sion (Протоколы сионских мудрецов)— es uno de los libros prohibidos más infames de la historia.

Publicado en 1902, en Rusia, Los Protocolos de Sión atacaba directamente al pueblo judío, señalando hipotéticos cónclaves y reuniones secretas de los llamados Sabios de Sión, detallando supuestos planes para el dominio mundial, los cuales comenzaban por tomar control de la masonería y el comunismo, y, a partir de allí, construir una larga espiral hacia el control total de la economía mundial.

Ahora bien, Los Protocolos de Sión son tan defendidos por sus entusiastas como desacreditados por los que defienden la postura de que se trata de un fraude. Lejos de querer resolver la cuestión, desde aquí nos proponemos simplemente razonar sobre el misterio, que en definitiva no deja tratarse de un misterio netamente bibliográfico.


Los historiadores sostienen, y no sin pruebas, que Los Protocolos de Sión fue creado por la policía secreta zarista en San Petersburgo, durante 1902. Desde 1917 se distribuyeron masivamente como forma de expiar las pésimas políticas europeas que desembocaron en la Gran Guerra, culpando, cuando no, a los judíos

Ahora bien, Los Protocolos de Sión están basados en un libelo redactado en 1890, bajo órdenes de Piotr Rachkovski, jefe de la delegación de la Ojrana, la policía secreta del Zar en Francia. Este libelo, a su vez, se construye sobre un panfleto incendiario de Maurice Joly contra Napoleón III, publicado en 1864, y, en menor medida, en la furiosa novela antisemita de Hermann Goedesche: Biarritz, de 1868, obra que posee un capítulo muy interesante, usado genialmente por Umberto Eco en su novela El cementerio de Praga, llamado El cementerio judío de Praga y el consejo de representantes de las doce tribus de Israel. Allí se describe una ominosa reunión entre los miembros de un clan rabínico durante el cual se convocó al Diablo y se lo sometió a las órdenes de esta facción inexistente de la judería cabalística.

Estos son los antecedentes conocidos de Los Protocolos de Sión, un gérmen de odio y absoluta falta de autocrítica de algunos pueblos europeos. En Alemania, por ejemplo, previo al ascenso ilegítimo de Hitler, Los Protocolos de Sión ya poseía 33 ediciones publicadas.

Diciembre de 1901. Sergei Nilus declara haber traducido al ruso unos textos misteriosos que tituló: Los Protocolos de los Sabios de Sion. Durante sus primeros quince años de vida, Los Protocolos de Sión tuvieron una influencia casi nula, pero desde 1917 se vendieron millones de ejemplares y se los tradujo a más de veinte idiomas. Los amigos de las conspiraciones mundiales afirman que las reuniones secretas aludidas en Los Protocolos de Sión se llevaron a cabo en el Primer Congreso Sionista de Basilea, Suiza, del 20 al 31 de agosto de 1897, presidido por el periodista Theodor Herzl.

Objetivamente no hay evidencias que sostengan esta teoría, ni siquiera existen pruebas sobre una organización llamada Sabios de Sion o Ancianos de Sion, detalle que, naturalmente, funciona como prueba irrefutable de su existencia para los académicos paranoides.

Resulta extraño que aquellos que sostienen la teoría de que Los Protocolos de Sión son reales eludan el hecho de que el texto posee apenas dos palabras en hebreo y, en cambio, aparezcan menciones tan extrañas como la del dios hindú Vishnú. Además de esta cita anómala, e improbable, en una obra religiosa judía, sumada a la ausencia de citas talmúdicas, Los Protocolos de Sión hace referencia directa al Rey de los Judíos, epíteto que los judíos han omitido en todas sus obras, religiosas y no tanto, desde el cisma entre el judaísmo y el cristianismo debido a que ofrece cierta confusión con la figura de Jesús.

Otro detalle interesante a favor de la falsedad de Los Protocolos de Sión es que la única cita en latín del texto: Per me reges regnant, que en español significa: «por mí los reyes reinan», pertenece al libro de los Proverbios, pero extraída de la Vulgata, es decir, de la traducción católica de la Biblia, eludiendo por completo la cita original en hebreo: Bi melajim imlejú.

Como apuntábamos anteriormente, gran parte de Los Protocolos de Sión son un plagio burdo, puntualmente, del Diálogo en los infiernos entre Maquiavelo y Montesquieu (Dialogue aux enfers entre Machiavel et Montesquieu), del francés Maurice Joly, obra que ataca a Napoleón III valiéndose de la voz y las ideas de Maquiavelo. Debido a que elaborar una crítica sobre la monarquía era un crímen, Joly imprimió su obra en Bélgica y luego intentó contrabandearla a Francia. La policía confiscó una partida en la frontera y el pobre Joly, juzgado el 25 de abril de 1865, fue condenado a 15 meses de cárcel. En 1878, abandonado por amigos y enemigos, se suicidó teatralmente.

Pero Maurice Joly tampoco está libre de acusaciones de plagio. Su novela se corresponde extrañamente con la obra Eugène Sue, Los misterios de las personas, aunque en aquella ocasión los conspiradores no son judíos, sino férreos jesuitas. A decir verdad, los judíos no aparecen en ninguna de las dos novelas que sirvieron de inspiración para Los Protocolos de Sión.

Curiosamente, el mayor indicio de fraude proviene de los propios Protocolos de Sión, donde se utiliza un sospechoso lenguaje autoincriminatorio. Nadie, señalan los escépticos, describiría sus manifiestas intenciones de dominar el mundo en esos términos. El texto, casi en su totalidad, está plagado de ambigüedades y lugares comunes, hecho que no impidió que floreciera en el inconsciente colectivo europeo, especialmente en sus facciones antisemitas, por lo que miles de personas lo consideraron como una verdad revelada. Este éxito proviene, quizás, de que Los Protocolos de Sión confirmaban, y en palabras de los propios judíos, lo que miles de antisemitas ya pensaban.

Ahora bien, no todo el misterio alrededor de Los Protocolos de Sión se limitó a la propanda antisemita, sino que hubo violencia en dosis medievales, y para nada literaria.

Los Protocolos de Sión aparecieron en un periódico de San Petersburgo en 1903, periódico editado por el racista y ultraderechista Pavel Krushevan; hombre habitué en diversos pogromos (cacerías, torturas y asesinatos de judíos). Los Protocolos de Sión le cayeron como anillo al dedo, y funcionaron como chivo expiatorio ante las sospechas de quienes por ignorancia, o intereses económicos, estaban aterrados ante los profundos cambios sociales que venían sucediéndose desde el siglo XIX. Muy pronto, hordas de temerosos y malintencionados creyeron que la democratización de Rusia, y el consecuente derrocamiento de la monarquía, provenían de una conspiración judeomasónica. La revolución de 1917 barrió con estas teorías, pero sólo en Rusia. Para aquel año Los Protocolos de Sión ya se habían extendido a toda Europa.

Los Protocolos de Sión está dividido en 24 capítulos, o protocolos, cuyos temas centrales son:

  • Falsa libertad política.
  • Estimulación de lo subversivo en el arte y la ciencia.
  • Guerras económicas.
  • Guerras mundiales y conflictos internos.
  • Revoluciones.
  • Falsos derechos para el pueblo masas.
  • Establecimiento del comunismo.
  • Control de los medios de prensa.
  • Corrupción en la política gentil.
  • Constituciones frágiles.
  • Educación basada en principios falsos.
  • Promoción de distracciones (juegos, entretenimientos, deporte)
  • Culto al dinero.
  • Control de la economía mediante la especulación.
  • Monopolios.
  • Gobierno mundial.
  • Destrucción de nacionalidades y diversidad de monedas.


Este repaso somero de los tópicos expuestos en Los Protocolos de Sión deja en claro las razones por las que se expandió con tanta facilidad alrededor del mundo.

¿Consecuencias directas de Los Protocolos de Sión? 60.000 personas asesinados en Rusia y, tal vez la peor y más terrible de todas, su utilización por parte del nacionalsocialismo.

Desde 1921 Adolf Hitler incorporó a Los Protocolos de Sión en sus discursos, cuya lectura y análisis fue determinante para enceder su odio. Luego, con el ascenso del nazismo, se convirtieron en tema de estudio en las escuelas alemanas, sirviendo como una especie de legalización del genocidio. Después de Mein Kampf, Los Protocolos de Sión se convirtieron en el libro de cabecera de las Juventudes Hitlerianas. Incluso el mismísimo Goebbels señala en sus diarios personales sobre la utilidad de Los Protocolos de Sión como herramienta de propaganda antisemita, y apunta que Hitler creía firmemente en su autenticidad, comentario que deja en claro que él mismo, así como otros miembros de la cúpula nazi, conocían se trataba de una falsificación.

También en 1921 Los Protocolos de Sión cruzaron el océano. Henry Ford, millonario de enorme influencia, los difundió ampliamente por muchísimas publicaciones y periódicos supuestamente serios. También financió varias ediciones de Los Protocolos de Sión, y fundó una publicación independiente llamada The Dearborn Independent, donde se denunciaba semanalmente, y a un costo accesible para el antisemita de clase media, la existencia de un complot mundial organizado por los judíos. Años después, antologizó sus artículos en cuatro volúmenes de un libro abominable: El judío internacional, que fracasó en los Estados Unidos pero que tuvo un éxito rotundo en Europa.

No es necesario retroceder en el tiempo para apreciar la influencia de Los Protocolos de Sión. Hoy en día existen muchos sitios dedicados a explotar el odio, el antisemitismo, el racismo, y toda una amplia gama de ideologías nefastas, contrarias a la razón y enemistadas con la lógica más básica. A todos nos gusta desentrañar los misterios de alguna teoría conspirativa, aunque en el caso de Los Protocolos de Sión esa teoría llevó a la muerte y tortura de millones de personas, cimentando el mayor genocidio de la historia moderna. Lo terrible, quizás, es la supervivencia de estas teorías, de que Los Protocolos de Sión continúen, aún hoy, siendo considerados como reales por decenas de miles de fanáticos, si no más, y que, al igual que en el pasado, sirva como caldo de cultivo para los odios más viscerales y aberrantes de nuestra sociedad.

En este sentido, es poco lo que el bibliófago puede hacer. Esgrimir pruebas, exponer datos que prueban la falsificación de Los Protocolos de Sión más allá de toda duda razonable, parece funcionar en un sentido inversamente proporcional a sus intenciones. Decir que algo tan seductor es falso, afirmar que todos los males de nuestra sociedad no provienen de una reunión de doce sonámbulos en Basilea hace más de un siglo, es como pretender alumbrar la mente de un idiota. Sin embargo, la verdad, esa entidad fugitiva y a menudo inexistente, es clara y palpable en los libros; y un plagio, por diminuto y resistente que sea, nunca pierde su naturaleza falaz.




Protocolos de los sabios de Sión.

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Libros prohibidos. I Libros extraños.


Más literatura gótica:
El artículo: «Los Protocolos de Sión»; libro y análisis fue realizado por El Espejo Gótico. Para su reproducción escríbenos a elespejogotico@gmail.com

14 comentarios:

ramon dijo...

La verdad no puedo asegurar que son reales o falsos pero sí puedo garantizar es que los sionistas que gobiernan Israel lo siguen "al pié de la letra..."

José dijo...

A qien redactó el artículo:
Seguramente consultaste en wikipedia y te tragaste todas sus patrañas... ingenuo.

Judío Observante dijo...

Todos ustedes gentiles no son mas que unos antisemitas que buscan inculcar odio contra nosotros el Pueblo Judío, además los masones son personas que ayudan al goy que sufre, el marxismo comunista una ideología a favor del pobre obrero gentil y el capitalismo un sistema beneficioso a favor de la propiedad privada.

Judío Observante dijo...

Los judios somos un pueblo que ha ayudado mucho a la humanidad gentil, sin Karl Marx los comunistas nunca hubieran hechon una revolución y lo mismo sin Lenin y Trotski. David Ricardo y Milton Friedman fueron férreos defensores de la propiedad privada a favor de la libertadad y Theodor Herzl un genio a favor deL nosotros como pueblo.Lo mismo podemos decir de los Iluminati.

Anónimo dijo...

si no desaparecio aun es porque algo tine algo de verdad contiene y es de iluso negarlo por completo, sean o no los judios autores de estos protocolos..

Anónimo dijo...

Probablemente sea cierto que son falsos y que han sido utilizados para justificar lo injustificable. Lo que no entiendo es porqué los hemos seguido al pié de la letra y estamos construyendo al pié de la letra el mundo que querían estos falsos sabio.

Anónimo dijo...

Pues eso dicen los protocolos: establecer el comunismo, crear revoluciones y guerras económicas, etc.

JAIRO ALEXIS dijo...

AMIGOS, yo le respondo brevemente sus conjeturas sobre el tema.

1. Los judíos son la tribu representante el pueblo de Israel moderno. Pero todas las naciones, absolutamente todas tienen en su sangre descendencia ancestral del pueblo hebreo a través de Avraham el profeta. Esto aunque es algo espiritual, realmente hay evidencias profundas que lo comprueban.

2. Todas las naciones tienen descendencia hebrea, pero ademas todas tienen descendencia babilónico. SI NO LO SABEN Babilonia fue la primer, naciòn, el primer imperio, la primer política y la primera religión del mundo, ahí se esclavizo al hombre tanto política, como religiosa, como militarmente.
3. Desde que todas las naciones fueron desterradas por la plaga de las lenguas por todos las partes del mundo su herencia perduró en la cultura, por eso las religiones se parecen, los errores políticos se repiten y el poder termina ganándole a la libertad.
4. El que esta detrás de los protocolos de los sabios de Siòn es HASatan o Satanàs y los principales lideres políticos y religiosos del mundo, se reúnen cada 23 años y actualizan sus fines..

POR ALGO SE CUMPLE PIE A PIE CADA LITERAL DE LOS PROTOCOLOS, EXACTAMENTE TODO HA SIDO EFECTIVO...
POR QUE EL ANTISEMITISMO Y ODIO A ISRAEL Y A LOS JUDÌOS??? POR QUE POR MEDIO DE ESE PUEBLO, QUE POR HERENCIA TAMBIÈN ES PUEBLO NUESTRO SOLO QUE NO LO SABEMOS, EL CREADOR PERMITE AL HOMBRE SER LIBRE DE TODA DOCTRINA Y CONOCER LA VERDAD Y SOBRE TODO CONOCERLE A EL, LIBRE COMO ERA ANTES EN EL JARDÍN DEL EDÉN. BÚSQUENLO, NO TIENE TEMPLO, NI DOGMA, NI RELIGIÓN NI OBLIGACIÓN SU NOMBRE ES YAHWEH.

Anónimo dijo...

Mira la cuestión con estos protocolos es que:

1 Lo haya escrito quien lo haya escrito, se esta cumpliendo al 100%

2 No se puede culpar a todo un pueblo por lo que unos hacen, no se debe generalizar

3 Para los que no se dan cuenta aun, los que gobiernan y por tanto traman todo esto son unos cuantos, generalmente los mas poderosos económicamente del planeta

4 Según las sagradas escrituras, TODAS las personas de las 3 religiones principales tenemos descendencia judía en cierto sentido, ya que estas 3 religiones se conocen como religiones Abrahamicas, así que sin importar si eres cristiano, judío o musulmán, todos tenemos las mismas raíces tengo entendido.

Por ultimo como dije anteriormente, quien haya escrito estos protocolos por la razón que sea, esto se estan cumpliendo, tendrías que ser un ciego para no darte cuenta de eso, así que esos protocolos no deben tomarse como una burla, porque existe alguien o algunos que no lo están tomando como un juego

Anónimo dijo...

no ha desaparecido no porque tengan algo de verdad ,sino por que gente que promueve el odio racial y el antisemitismo,como neonazis iletrados y catolicos lefebristas,lo siguen editando,aunque no tengan pruebas de su autenticidad.

Anónimo dijo...

Pues si es falso, que casualidad que los judíos son dueños de los medios informativos, de los medios de entretenimiento, de la reserva federal de EU, y complotearon para hacer la revolución rusa y crear el comunismo

Anónimo dijo...

Los protocolos de los Sabios de Sion fueron un documento que circulo entre la policia secreta zarista respecto de los golpes financieros mundiales, y militares que el sionismo tenia preparado para todo el mundo. Los que lo hayan utilizado para culpar a toda la comunidad judia se equivoco, pero es cierto que estos planes revelados a traves de los protocolos involucran directamente al sionismo (que no es toda la comunidad judia). fue la misma situacion cuando en 1789 la policia austriaca arresta a Wheishaupt al encontrarle informacion sobre la perpetracion del golpe de estado en francia o ¨revolucion francesa¨ la casa real de autria quizo advertir a francia del peligro pero los mismos lo minimizaron por subestimar el poder de ellos, y luego sucedio lo que todos sabemos.

Anónimo dijo...

Es la historia de lo que es pasando,
No importa quien los escribiera

Anónimo dijo...

el sionismo no es solo el pueblo de Israel es todo el poder financiero,politico,de medios de comunicación que manejan la sociedad con cada vez mas éxito desde la revolución francesa.Fue precisamente la revolución americana y luego la francesa el inicio de la caída de la sociedad occidental,destruccion de la aristocracia(gobierno de los mejores,moral)y creación de la oligocracia(gobierno de unos pocos,sin moral=protocolos de sion),el que no quiera ver que no vea,el que tenga inteligencia que entienda.



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