Libros y novelas de «Silent Hill».


Libros y novelas de «Silent Hill».




La Trilogía de Silent Hill es una serie de extrañas novelas de terror escritas por Sadamu Yamashita, que se inició en 2006 [ver: Psicología de Silent Hill]

Los títulos de la trilogía son: Silent Hill: la novela (Silent Hill: The Novel); Silent Hill 2: la novela (Silent Hill 2: The Novel) y Silent Hill 3: la novela (Silent Hill 3: The Novel).

Los tres libros de la trilogía de Silent Hill fueron adaptados por Sadamu Yamashita del argumento central del juego, y presentan prácticamente a todos los personajes, ambientes, y, sobre todo, la fuerza que impulsa la historia.

Lamentablemente las novelas de Silent Hill solo se encuentran disponibles en japonés, al menos en ediciones digitales en PDF, y en algunas versiones dudosas en inglés; aunque se esperan novedades para finales de este año y comienzos del siguiente.

El primer libro, Silent Hill: la novela, se divide en tres capítulos: Niebla, Oscuridad y Pesadilla. Sus 272 páginas contienen algunas ilustraciones de Masahiro Ito. Silent Hill 2: la novela, se desarrolla a lo largo de 304 (y 4 ilustraciones de Masahiro Ito). Sus capítulos, ocho en total, insinúan una profundización del argumento. La tercera entrega de la saga: Silent Hill 3: la novela, cuenta con 288, y de alguna forma empieza a cerrar el círculo de la historia.

Mi absoluto desconocimiento del idioma japonés me previene de publicar el primer capítulo de la trilogía, ya que me resultaría imposible contrastarlo con el original; sin embargo, la fuente es bastante confiable como para tomar ese pequeño riesgo.

A continuación les dejamos un breve fragmento del primer capítulo de Silent Hill: la novela; titulado Niebla.




Silent Hill: la novela: Niebla.
Sadamu Yamashita.

Harry Mason estaba muerto de cansancio. Había estado conduciendo sin parar, por lo menos 5 horas ya que había llegado muy tarde, el cielo azul brillante hacia tiempo que había dado a la fría oscuridad de la noche. Volteo la mirada de la carretera para ver la hora, que marcaba las 22:52. Era un infierno en coche viajando de Sewell a Silent Hill, en realidad hubiera preferido salir a la mañana siguiente, pero su maldito horario de trabajo entro en conflicto con sus vacaciones, así que era salir esta noche o nunca. Los faros brillaban por la carretera de la montaña borrosos por la oscuridad, Harry luchaba por mantener su enfoque en volante y en el camino por delante. El camino estaba colocado junto a una de las montañas que bordeaban la tranquila ciudad turística y también un gran lago, si perdiera el control del jeep seria un infierno al caer por la ladera de la montaña repleta de árboles. Del otro lado de su jeep color rojo y blanco, la pared del acantilado se alzaba a lo alto por encima de el en la negrura de la noche.

Harry lanzó una rápida mirada furtiva a su hija. Cheryl se encontraba profundamente dormida, abrazando su cuaderno de dibujos sobre su vestido azul. Su cabello oscuro corto cayo sobre sus ojos así que Harry se inclino para quitársela de la cara. Cheryl había insistido bastante en ir esa noche. Explicando que de esta forma, seria capaz de despertar en el hotel al día siguiente y disfrutar el mayor tiempo posible de vacaciones, en lugar de gastar medio día de viaje. Harry estuvo de cuerdo en ese punto, su pequeña hija era muy lista y aun que tenia solo siete años o siete años y medio como ella siempre le recordaba, parecía que tomaba la mayor parte de las decisiones, “bueno”, pensó para si, “es la única mujer de mi vida”.

Ahogó una pequeña sonrisa y regreso su mirada a la carretera, siempre cambiante, fascinado por las líneas blancas que pasaban lentamente por debajo de su jeep y el tranquilo sonido del motor. La obscuridad absoluta por debajo de la montaña a lado suyo lo ponía un poco nervioso por lo que siguió de cerca el camino en dirección a Silent Hill. “Será un bonito punto de vista cuando amanezca”, pensó.

De repente Harry observó una luz en su retrovisor. Se dio cuenta que era un luz de una motocicleta, y sintió algo de alivio. Habían pasado cerca de 45 minutos desde que había estado en el trafico de carretera, puesto que fue casi la única manera de entrar a Silent Hill por el lado norte de “el lago Toluca” (Toluca Lake). Era viernes por la noche y ya marcaban las 23:00 horas, no había tráfico por ningún destino o precedencia en la ocupada ciudad turística, lo que era un poco extraño, si esa era la palabra adecuada. Cheryl murmuro algo en sueños y se movió un poco. Harry sonrío y volvió la cabeza para asentir en el motorista que pasaba a lado suyo. Se dio cuenta que era una agente de policía, bestia cuero y casco blanco sobre una de esas motos anchas que usa la policía. Ella asintió la cabeza hacia el cuando pasaba por su izquierda, y luego, en unos segundos se perdía la luz trasera de la motocicleta por una curva en la carretera.

Harry miró nuevamente el reloj, 23:13, “no debe estar muy lejos, otros 15 minutos mas o menos”; contemplo como despertaba Cheryl, ella le había dicho que quería ver Silent Hill cuando llegaran, pero en realidad no había mucho que ver en ese momento, así que durmió un poco mas, el la despertaría cuando llegaran. Ella doblo uno de sus pies, el se molesto cuando puso sus zapatos en el asiento, entonces miro como se los quitaba. “Tan buena chica”, pensó. Harry volvió a mirar la carretera y se fijo en una luz a la distancia, “algún coche”, supuso. El jeep zumbaba y se dio cuenta de la fuente de la luz, parecía estar estacionada a lado del acantilado en la carretera, pero, al pasar a lado de la luz, se dio cuenta que no era un coche, si no la misma moto de la policía que había pasado hace unos 10 0 15 minutos antes. “Curioso, las luces no se apagaban”, pensó, mientras estas desaparecían por otra curva. Ni un rastro de la policía, “tal ves debería parar”, volvió la cabeza hacia atrás. Derepente, sin previo aviso, apareció una figura delante de el. Una mujer joven vestida con un traje azul oscuro y una corbata roja, eso fue lo único que Harry había tenido tiempo de mirar. La mujer grito y levanto los brazos para protegerse la cara mientras el jeep se deslizaba hacia ella, ¿de donde había salido?, Harry piso el freno y giro el jeep a un lado, este comenzó a girar en la carretera, lanzándolo contra la puerta del asiento del conductor, golpeando su cabeza lo que provoco que perdiera visibilidad, mientras el jeep se estrellaba en contra de algo. De repente, Harry se inclino, se agarro del cinturón y esa fue la ultima cosa antes de perder la conciencia; el Jeep, literalmente reboto en la carretera y callo por el acantilado, en la oscuridad que se miraba hay abajo.

Harry extendió la mano, se toco la cabeza, su mano quedo pegajosa y húmeda… ¡SANGRE! Su mente nado con pensamientos y sentimientos al azar. Lucho para repasar los acontecimientos que han llevado a su Jeep al fondo del acantilado en medio de un montón de árboles destrozados, “Motocicletas en la carretera, una policía desaparecida, la mujer de azul frente al Jeep, la volcadura, el golpe en la cabeza”; abrió los ojos y se sorprendió al ser recibido por una luz blanca brillante en ese acantilado oscuro y sofocante de la noche que recordaba hace unos momentos antes. ¿Cuánto tiempo había estado inconciente?, por supuesto que no toda la noche, miro hacia abajo y vio que por lo menos todavía estaba sujeto en el asiento del conductor, la luz blanca se filtraba por las ventanas. ¡CHERYL!, se limpio su dolorida cabeza para mirar el asiento del pasajero que estaba vacío. “No Cheryl”, no estaba el cuaderno de dibujo, la puerta abierta y el zapato de Cheryl en el piso aun costado del Jeep, “¿abra ido a pedir ayuda?”, Harry rápidamente se quito el cinturón de seguridad y, poniendo resistencia contra su fuerte dolor de cabeza, empujo la puerta y salio.

Harry camino unos pasos y se volvió para inspeccionar los restos. Se asusto mucho al estar con vida, el Jeep estaba destrozado, pareciera que una pareja de gigantes había jugado futbol con el como lo hacen los niños con latas de refresco, la parte frontal, laterales y el techo estaban aplastados y destrozados, era evidente de esperar al caer por el acantilado. “Espero que donde quiera que este Cheryl, este bien”, miro a su alrededor con rapidez para buscarla sin detenerse, “¿y si ella regresara?” pensó. Estaba realmente brumoso, apenas podía ver a 10 pies delante de el, nada mas que niebla blanca en todas direcciones, la luz de día apenas si atravesaba la neblina, sabia que el Lago Toluca despedía una bruma misteriosa, pero nunca había visto antes un pueblo tan devorado por ella; levanto la vista hacia el acantilado donde el Jeep yacía caído; su caída era evidente, por el camino de árboles rotos y trozos de Jeep esparcidos por todas partes. “Tal vez esta allí, herida en el acantilado por haber sido expulsada por la puerta durante el choque”, el Jeep se había estrellado contra una cerca de madera y se asentó en el medio del camino entre los arbustos atravesando la valla de metal.

Paso a paso, detrás de el en el camino, Harry se dio vuelta y miro a trabes de la niebla, no podía ver nada, pero había oído definitivamente unos pasos. “Tal ves fue Cheryl tratando de encontrar su camino a trabes de la niebla”, el camino es para llegar a Silent Hill de todos modos, tal vez a unos 10 minutos por carretera; empezó a correr hacia esos pasos, que parecían haberse detenido por un momento. Harry estaba contento de haber traído su chaqueta marrón de cuero bombardero, el aire era sorprendentemente frío para ser Agosto, debe ser a razón de la niebla; corrió por el camino ignorando el dolor de cabeza, limpiándose las manos con sangre en sus pantalones vaqueros; grito fuertemente “¡Cheryl!”, pero no hubo respuesta, “ahora que lo pienso, ¿no es este el mismo camino de hace siete años que el y su esposa habían encontrado a esa pequeña bebe?, acurrucada en una manta en la cuneta”, recordó…

Harry había conocido a Susan, su esposa, hace solo dos veranos antes de aquel día que encontraron a Cheryl, se habían conocido en Silent Hill, en una pequeña cafetería después de que derramo agua sobre el, los dos se quedaron sentados solos. Ella vivía ahí; el estaba en un viaje de negocios, era escritor y su editor se encontraba en Silent Hill; Harry se sintió atraído de inmediato por su rostro delgado y cabello oscuro, la forma en que sonreía y agitaba su cabello cada ves que le hacia un cumplido. Ellos habían congeniado casi de inmediato, después de tantos viajes de ida y vuelta a Silent Hill, fue que se casaron y se mudo a la ciudad natal de Harry, Sewell. Era el matrimonio perfecto, al verano siguiente volvieron a Silent Hill para visitar a los padres de Susan quienes habían tomado afecto a Harry. Camino a casa, se estacionaron a lo largo de la carretera de salida a Silent Hill en la parada de un cementerio cercano para rendir homenaje a los abuelos de Susan, hay, hablaron una eternidad en el silencio del cementerio antes de regresar al Jeep. Pero algo era diferente, en una cuneta yacía un pequeño bulto de tela y ahí, se encontraba un pequeño bebe recién nacido. Decidieron criar a la pequeña como propia, le dijeron en una edad joven que había sido adoptada. Los tres continuaron la tradición de visitar Silent Hill cada mes de Agosto por unos días, pero hace tres años, Susan enfermo gravemente y falleció; Cheryl fue la mas madura al respecto que Harry, de vez en cuando ella todavía lo abrasa cuando lo encuentra llorando en silencio en el dormitorio que había compartido una vez con su esposa.

Los viajes a Silent Hill continuaron después, solo los dos, y aunque Cheryl disfrutaba los viajes y amaba ver a sus abuelos, para Harry era la cosa mas dolorosa que Harry tenia que hacer, dejaría a Cheryl con los padres de Susan por un día e iría por su cuenta a todos los lugares que el y Susan solían ir juntos. La pequeña cafetería donde se conocieron, el parque de atracciones junto al lago donde se metió para compartir una noche de pasión junto al lago brumoso, y por supuesto, el cementerio, donde Susan y el hablaban siempre del día que habían encontraron a Cheryl; Susan ya descansaba por siempre en paz en ese cementerio y Harry había derramado allí lo que debe haber sido un millón de lagrimas por su amor perdido.




Novelas góticas. I Novelas de zombis.


El resumen de la Trilogía de novelas de Silent Hill: libros y novelas de Silent Hill fue realizado por El Espejo Gótico. Para su reproducción escríbenos a elespejogotico@gmail.com

6 comentarios:

chrisis dijo...

y donde puedo bajar el libro?

chrisis dijo...

y donde puedo bajar el libro de Silent Hill?

chrisis dijo...

Donde puedo descargar el libro?

Unknown dijo...

Muy bueno el post de hoy.
Felicitaciones

Anónimo dijo...

Alguna novedad con el libro en español?

Unknown dijo...

Alguien sabe algo? Esta la traduccion? Dejar un post asi desp dedecir qe iva a haber novedades es espantoso...igual esta bueno qe hayas dejado esa parte del capitulo primero....estaria buenisimo que cumplas y sigas...abrazo



Lo más visto esta semana en El Espejo Gótico:

Sobre ruidos paranormales intensos.
Relato de Shirley Jackson.
Mitos de Cthulhu.

Taller gótico.
Poema de Hannah Cowley.
Relato de Thomas Mann.