Con enorme placer de nuestra parte les dejamos otro excelente relato de la escritora Alibel Lambert, quien generosamente nos ha permitido compartirlo con ustedes.
Caía la tarde. Entre la penumbra ya existente detrás de las tumbas, la tiniebla, densa y húmeda, comenzaba a cubrirlo todo. Desde el bosque más cercano podía oírse el viento, que como un lamento parecía surgir desde lo más profundo, podría decirse, desde el mismísimo infierno.
El hombre solitario y triste, lentamente atravesaba el cementerio. Su rostro no mostraba realmente lo que su alma sentía. Desde hacía seis meses estaba esperando ese momento. Desde que supo que no todo estaba perdido, aún a pesar de la muerte de su esposa. Hoy volvía a tener una nueva esperanza. Buscando ansioso y desesperado, había encontrado en aquella antigua tienda una oportunidad. El libro que allí vendían, poseía secretos milenarios para volver nuevamente a la vida a su amada. Y aunque había gastado en él toda su fortuna, no le interesó. Que ella volviera era lo más importante. Ahora su corazón latía fuertemente. Pero a pesar de ello conservaba la calma. Sabía que debía ser así, para no cometer errores. Una sola falla y ya no tendría otra oportunidad.
Llegó al lugar, se paró frente a la tumba y sonrió tiernamente...
-Aquí estoy, – dijo en un susurro – he venido a buscarte.
Comenzó a cavar lentamente. Luego de varios minutos la pala chocó contra el ataúd. Sigue cavando suavemente hasta desenterrarlo por completo. Con inmenso esfuerzo, logra levantar el cajón. Lo sube hasta dejarlo apoyado sobre el césped. Lo limpia, lo acaricia...
Antes de abrirlo, toma el libro y prepara todo para la ceremonia. En pocos minutos más, ella estará nuevamente junto a él. Después del accidente del tren en el que ella viajaba para ver a su madre, le entregaron el ataúd cerrado. No pudo ver su rostro por última vez y esa angustia lo ahogaba. Pero ahora había dejado de importarle. Unos minutos más y estarían juntos.
Por fin terminó de prepararlo todo. Tomó la barreta y abrió el cajón...
Un grito desesperado resonó en el cementerio. Dentro de una bolsa se hallaban los trozos deshechos. Era imposible pensar, que alguna vez, estos formaron el bello cuerpo de su amada esposa...
Más relatos de Alibel Lambert. I Relatos góticos.
El relato Otra oportunidad fue escrito por Alibel Lambert, todos los derechos de están reservados.
Otra oportunidad.
Alibel Lambert.
Caía la tarde. Entre la penumbra ya existente detrás de las tumbas, la tiniebla, densa y húmeda, comenzaba a cubrirlo todo. Desde el bosque más cercano podía oírse el viento, que como un lamento parecía surgir desde lo más profundo, podría decirse, desde el mismísimo infierno.
El hombre solitario y triste, lentamente atravesaba el cementerio. Su rostro no mostraba realmente lo que su alma sentía. Desde hacía seis meses estaba esperando ese momento. Desde que supo que no todo estaba perdido, aún a pesar de la muerte de su esposa. Hoy volvía a tener una nueva esperanza. Buscando ansioso y desesperado, había encontrado en aquella antigua tienda una oportunidad. El libro que allí vendían, poseía secretos milenarios para volver nuevamente a la vida a su amada. Y aunque había gastado en él toda su fortuna, no le interesó. Que ella volviera era lo más importante. Ahora su corazón latía fuertemente. Pero a pesar de ello conservaba la calma. Sabía que debía ser así, para no cometer errores. Una sola falla y ya no tendría otra oportunidad.
Llegó al lugar, se paró frente a la tumba y sonrió tiernamente...
-Aquí estoy, – dijo en un susurro – he venido a buscarte.
Comenzó a cavar lentamente. Luego de varios minutos la pala chocó contra el ataúd. Sigue cavando suavemente hasta desenterrarlo por completo. Con inmenso esfuerzo, logra levantar el cajón. Lo sube hasta dejarlo apoyado sobre el césped. Lo limpia, lo acaricia...
Antes de abrirlo, toma el libro y prepara todo para la ceremonia. En pocos minutos más, ella estará nuevamente junto a él. Después del accidente del tren en el que ella viajaba para ver a su madre, le entregaron el ataúd cerrado. No pudo ver su rostro por última vez y esa angustia lo ahogaba. Pero ahora había dejado de importarle. Unos minutos más y estarían juntos.
Por fin terminó de prepararlo todo. Tomó la barreta y abrió el cajón...
Un grito desesperado resonó en el cementerio. Dentro de una bolsa se hallaban los trozos deshechos. Era imposible pensar, que alguna vez, estos formaron el bello cuerpo de su amada esposa...
Alibel Lambert.
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El relato Otra oportunidad fue escrito por Alibel Lambert, todos los derechos de están reservados.
Debía saber de antemano que no fue de muerte natural, si fue arrollada por un tren,seguro que su cuerpo estaría deshecho en partes
ResponderEliminarPero a veces desear recuperarla no entendío que de la muerte nadie resucita